Es hora de retomar este mandato, no hacía afuera, si no empezar desde adentro.
Urge reevangelizar a los católicos. La tibieza, la indiferencia y el conformismo nos está debilitando más que si fuéramos paganos o enemigos declarados de Iglesia y de la fe.
El pecado de muchos bautizados es: Predicar y no practicar, creer pero no vivir de acuerdo con lo que se cree.
El momento actual nos urge, no solo evangelizar a los de afuera, sino también a los de adentro. Hay que evangelizarse para evangelizar, esa es la responsabilidad de todos los bautizados.
"En los tiempos pasados, la apologética consistía en defender la fe católica de los ataques de sus enemigos. Se dirigía esencialmente a los de afuera, para que tomaran conciencia de la falsedad de sus ataques. Hoy, la apologética se dirige, antes que nada, a los de adentro para que no se dejen confundir por los que se salieron de la misma Iglesia y tratan de llevárselos a sus grupos. Antes, los que no conocían la fe eran los de afuera; hoy, los que no conocen la fe son los de afuera y los de adentro" (La Apologética no está de moda. P. Flaviano Amatulli Valente).
Así que es hora de evangelizar a los bautizados, como lo dijo en su momento un gran amigo, Pepe Prado. Comencemos que el tiempo apremia.